¿Y qué pasaría en un universo paralelo a este? ¿Qué sería de mí? Me pregunto si sería la chica paciente que guarda la calma ante todo, si tendría esa capacidad de verle la parte positiva a cualquier problema sin crear el mayor de los dramas. ¿Acaso podría sonreír incluso cuando no quiera o poder con todo sin evitar nada? Mitades conectadas, decisiones fáciles, dudas resueltas, felicidad latente, inocencia intacta. ¿Podría ser así, de verdad? No sé, yo siempre he sido más de impacientarme por cualquier cosa. Fuera lo que fuese: una respuesta breve, un minuto que no llega, días que no acaban... Mi calma es como el tiempo, a veces de mi parte y otras no. Incluso en ocasiones, a contrarreloj. ¿Y dónde queda escrito eso de que los problemas tengan parte positiva? Sí, lo sé, también soy de esas que "si no lo ven, no lo creen". Suelo ponerle mala cara a la vida, ¿qué? Las sonrisas no son algo que deban llevarse siempre como accesorio; "las cosas valiosas, solo en ocasiones especiales" -me dice siempre mi madre- y también soy de las que siguen los consejos de una mujer como ella. No me considero fuerte, en todo caso: si no puedo con algo lo mando a la mierda y cuando pueda: lo enfrento. Jamás he conseguido poner de acuerdo a mis mitades, aunque no sé realmente si alguna vez he tenido de eso. El tiempo nunca está definido cuando se trata de tomar una decisión, al menos no para mí y si el asunto va de respuestas, por favor, soy más de preguntas sin contestar.
Hablemos de inocencia, ¿eso sigue existiendo? A decir verdad, me resulta gracioso hasta decirlo. Este mundo es como un cartel gigante que pone: +18, desde que naces debes prepararte para vivir algo en lo que prescindas de inocencia, porque ya ni la infancia es como era. En cuanto a la felicidad, yo prefiero serlo siempre, pero preferir no significa que pueda serlo. Aunque en realidad sí, pero me gustan más los cambios de humor, sino: ¿qué sentido tiene ser una mujer? Así es hombres del mundo, soy un constante cambio de humor con piernas. Exactamente: soy como una mezcla de hormonas, emociones y seguridad. Porque si hay algo que si tengo claro: es que vivo segura de mí misma, de lo contrario sería como uno de esos borregos que siguen el paso de los "corderitos" que nos gobiernan. Corruptos hasta la médula, imbéciles de nacimiento. Y ahora, me gustaría terminar tal y como empecé: ¿y qué pasaría en un universo paralelo a este? ¿Seríamos como somos, viviríamos como vivimos?